Si al hacer cualquier actividad física usted se siente relajado, optimista, seguro de sí mismo y, finalmente, feliz, no es porque hoy amaneció con el pie derecho o porque el clima favoreció su extenuante día de entrenamiento…Su reacción es meramente química y si quiere seguirse sintiendo así… ¡Sí! Tiene que seguir ejercitándose.
La actividad
física libera en el cuerpo una serie de hormonas -más de 50- que le hacen que
usted se comporte de manera diferente e incluso, desde antes de iniciar su
rutina, ya muchas de estas sustancias recorren su organismo y le envían
mensajes a su cerebro.
El ejercicio
físico es la principal fuente de secreción de hormonas y estas son las
causantes de las principales reacciones positivas de su cuerpo cuando se ejercita.
Claro está, todas con diferentes efectos. De acuerdo con Jorge Lobo,
especialista en Educación Física de la Universidad de Costa Rica (UCR), hay más
de 50 hormonas que secreta el cuerpo cuando se hace actividad física, pero las
más comunes son la insulina, la adrenalina, la serotonina, la hormona del
crecimiento y las endorfinas.
Aunque
seguramente usted ha escuchado que las endorfinas son las “hormonas de la
felicidad”, en realidad no es así. Este seudónimo le cae mejor a la serotonina,
que se desarrolla con ejercicios de esfuerzos prolongados y extensos.
“La serotonina
se secreta con esfuerzos muy prolongados o muy fuertes. Por ejemplo, el
ciclismo, que son sesiones de más de tres horas, las maratones, el spinning,
que es un ejercicio de mucho esfuerzo, por ejemplo”, indicó Lobo.
¿Qué se siente?
Poco apetito, baja el sueño, felicidad, alegría, satisfacción. Por eso, es que,
si usted hace ejercicio de alto impacto en horas de la noche, siente que no
puede dormir. Una vez pasado el efecto, cae rendido.
Adrenalina: La hormona de
la fuerza:
Se logra, en la
mayoría de los casos, con los ejercicios anaeróbicos, como por ejemplo levantar
pesas, deportes de combate, deportes extremos o ejercicios donde hay lapsos de
tiempo de descanse.
La adrenalina
genera euforia y fuerza, es una reacción casi instintiva de defensa y contra la
pasividad.
“Algunos
deportes son de alto nivel de adrenalina, los deportes de combate, de lucha, el
levantar pesas, porque, aunque dure solo 2 segundos levantando la pesa,
requiero toda la fuerza. La adrenalina es una respuesta a la lucha”, comentó
Lobo.
Lobo menciona que,
en muchos casos, la adrenalina incluso permite que el dolor ante una lesión,
desaparezca momentáneamente, mientras se termina la prueba.
Endorfina: la hormona del
placer: Ahora sí, vamos a hablar de la endorfina, mejor conocida como la
hormona del placer y que también se puede estimular por medio del ejercicio.
Solo que, en
este caso, la actividad debe de ser mucho más relajada, pero estimulante. La
meditación, el yoga y el estiramiento la producen.
Las endorfinas son neurotransmisores, se producen en las glándulas
pituitarias, lo que hacen es enviar señales al cerebro y producir la sensación
de bienestar, de control, placer y de satisfacción. También minimiza el dolor,
preparan al cuerpo para que continúe luchando y controle el dolor a cambio de
la satisfacción.
“Esto puede ser
un poco peligroso, porque si yo tengo una lesión y por el alto grado de
endorfinas no siento dolor. la endorfina va a bloquear el dolor y yo no voy a
notar el daño, cuando se baje el efecto me voy a encontrar con el tobillo el
doble de inflamado o la lesión mucho más afectada”, comentó el especialista.
Las
contraindicaciones:
Todo con exceso
no es recomendable, ni siquiera el ejercicio, pero como estamos enfocados en
las hormonas ¿Qué pasa cuando nos excedemos en el ejercicio?
Primero, la
serotonina controla el apetito, por lo que si usted se excede en la actividad
física perderá el hambre y, de acuerdo con Lobo, esto podría repercutir en trastornos
alimenticios.
El cuerpo es
sabio e indica cuando se debe parar el ejercicio, pero la adrenalina, endorfina
y la serotonina bloquean todas estas alertas, por lo que usted podría
obviarlas.
¿Qué se
recomienda? Si usted sufre alguna lesión durante su entrenamiento, no la
ignore, puede que en el momento no le duela, pero más tarde la situación sin
duda se pondrá peor. Si no siente apetito, aún, así coma a sus horas y no se
brinque ninguna comida.
A menos que usted sea un atleta de alto rendimiento, no abuse del ejercicio, lo que se recomienda es una hora diaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario